Se entiende por logística inversa “el proceso de planificación, implantación y control de forma eficiente y al coste óptimo del flujo de materias primas, materiales en curso de producción y productos acabados, así como el de la información relacionada, desde el punto de consumo hacia el punto de origen con el objeto de recuperar el valor de los materiales o asegurar su correcta eliminación”.
Dicho de otra manera, es la etapa de la cadena de suministro que arranca en el momento en el que se produce la entrega del producto al cliente final y este se dispone a devolverlo al distribuidor o proveedor.
Así pues, mientras que la logística directa se encarga de llevar una mercancía de un punto A a un punto B, la logística inversa se encarga de realizar el trayecto inverso. Es decir, desde el punto B al punto A.
Ahora que ya sabemos qué es veamos los distintos tipos de logística inversa que existen y algunos ejemplos de ellos.
Tipos de logística inversa
Existen básicamente dos tipos de logística inversa y son estos:
Logística inversa de residuos
Se encarga de la recolección, del reciclaje y del tratamiento de todos y cada uno de los desechos generados por la mercancía tras la comercialización de esta.
El objetivo de la logística inversa de residuos es doble:
- Reducir el impacto que estos residuos provocan en el medio ambiente.
- Reutilizar los residuos que genera la mercancía para aprovecharlos como repuestos o como materias primas en los futuros procesos de producción.
Logística inversa de devoluciones
Se encarga de gestionar el proceso de devolución de la mercancía entregada al cliente desde el punto de recepción hasta el punto de origen.
Un proceso que tiene lugar cuando se produce una entrega errónea o cuando el producto no logra satisfacer las necesidades y/o expectativas del cliente.
Esta última es la que más relación tiene con la logística de eCommerce, siendo un aspecto esencial para garantizar el mejor servicio de atención al cliente. Un punto, en el que, optimizar la logística tiene más peso en la decisión final de compra de los consumidores.
Ejemplos de logística inversa
Una vez entendida qué es la logística inversa y cuáles son los tipos de logística inversa que existen vamos a ver algunos ejemplos.
- Reciclaje: La logística inversa permite el reciclaje de las materias primas para la fabricación de nuevos productos. La incorporación de políticas de sostenibilidad es uno de los factores que mayor peso tienen en la configuración de la imagen de marca por parte de los consumidores.
- Reutilización: La logística inversa permite dar un nuevo uso a las mercancías que han sido utilizadas y que no han sufrido daño alguno durante el período que abarca desde la entrega hasta la recepción en el punto de origen.
- Venta outlet: La logística inversa, en tanto en cuanto permite la reutilización, abre nuevas opciones de negocio para dar salida a aquellos productos que cuentan con pequeñas taras, pero que pueden ser utilizados de nuevo sin perjuicio alguno para el segundo receptor. Este sistema ofrece a los vendedores la posibilidad de obtener un beneficio con la venta de productos que han sido devueltos, aliviando su stock y reduciendo sus desechos.
- Reparación: La logística inversa permite que los usuarios puedan reparar aquellos productos que han adquirido y que necesitan ser tratados para volver a estar operativos al 100%. Las empresas que ofrecen servicios de reparación completos y diligentes cuentan con una mejor imagen de marca y con un nivel de fidelización mayor.
- Restauración: La logística inversa permite alargar el período de vida de aquellos productos que necesitan un retoque o una actualización para poder seguir siendo utilizados. Un claro ejemplo son aquellos productos que requieren de un nuevo software para poder seguir siendo operativos con el paso del tiempo. Un servicio que supone un enorme ahorro para los clientes y que tiene un impacto enormemente positivo en el medio ambiente.
- Remanufactura: La logística inversa permite que mercancías que ya han cumplido su ciclo vital puedan ser utilizadas completa o parcialmente en la fabricación de nuevos productos. Un proceso que supone un enorme ahorro a largo plazo para las empresas.
- Canibalización: La logística inversa permite el uso de determinados componentes o piezas de productos retornados por los clientes y que están en perfectas condiciones para volver a formar parte del mecanismo de nuevas mercancías. Un sistema ampliamente extendido entre las compañías tecnológicas que, de nuevo, supone un importante ahorro, tanto económico como medioambiental.
- Vertido controlado: La logística inversa permite controlar el vertido de residuos y garantizar que estos son tratados y suponen un mínimo impacto en el medio ambiente.
- Incineración: ofrece la posibilidad de reutilizar determinadas materias primas a través de un proceso como el de incineración que, a su vez, permite obtener energía.
10. Refabricación: una logística inversa permite, en último término, que determinadas mercancías que habían perdido su utilidad, la recuperen. Gracias a la refabricación unos neumáticos pueden convertirse en la suela de unas zapatillas y un collar en unos pendientes.